Cuando un adorador de los Dioses Oscuros ha recorrido el Sendero a la Gloria conquistando tierras y masacrando rivales, acaba llegando hasta el obstáculo nal antes de su ascensión a la daemonicidad. Lograr tal bendición malsana requiere un nivel de desempeño muy superior al de cualquier prueba anterior, y solo los actos de la más espectacular violencia pueden esperar llamar la atención del Panteón Oscuro. Por tanto, un Señor del Caos recién coronado buscará las batallas más sanguinarias y reclutando sus propios ejércitos de saqueo.

El título de Reina Guerrera Pactoscuro se confiere solo a las mujeres que unen y lideran múltiples tribus. Pero ni alzarse a tales cotas es suficiente, pues este poder no es más que el primer paso en el Sendero a la gloria ante la mirada de los Poderes Ruinosos. Por ello, estas líderes deben hacer juramentos cada vez más importantes y desempeñar actos de violencia y conquista cada vez más peligrosos. Cuando se requiere discreción para obtener un territorio ventajoso, una Reina Guerrera solo contará con sus guerreros de élite para acometer su estrategia. Las patrullas invasoras tienen el tamaño suficiente para derribar destacamentos rivales o fauna monstruosa sin perder rapidez y agilidad.